No necesitas buscar trabajo. El trabajo debería buscarte a ti.
Mi trayectoria en recursos humanos, especialmente en selección, me ha permitido presenciar la tragedia de muchos candidatos. Hoy, enviar tu currículum a cientos de portales de empleo y esperar una llamada rara vez tiene resultados. En realidad, esa llamada tan esperada suele ser una excepción más que una regla.
Imagínalo como si estuvieras buscando pareja. Es mucho más fácil cuando eres atractivo y popular. De manera similar, para ser atractivo en el mundo laboral, no se trata de apariencias físicas, sino de tus habilidades y experiencia. Es mucho más fácil cuando eres un candidato que las empresas necesitan y quieren.
Es desesperanzador enviar cientos de postulaciones y no obtener respuesta. A veces parece imposible conseguir empleo. Pero quizás el problema no sea la falta de oportunidades, sino la necesidad de potenciar esas habilidades que los empleadores buscan. Ahí es donde puedo ayudarte.
En esta primera parte de la guía sobre cómo encontrar trabajo quiero que aprendas 1 cosa. Debes ser un candidato irresistible para los reclutadores, al punto que sean ellos los que te busquen y te ofrezcan empleo. No necesitas mejores técnicas de postulación o estrategias para saltarte procesos, ni siquiera enviar más CVs. Si estás aquí, ya te diste cuenta de ello.
Cuando eres tú a quien los reclutadores buscan, tus oportunidades se disparan. Los procesos son menos abrumadores, las preguntas son más sencillas y hasta puedes saltarte algunas entrevistas, simplemente porque eres el candidato que todos desean. Es como ser el popular del colegio a quien todos quieren conocer.
Este cambio de mentalidad puede hacer la diferencia en que encuentres trabajo y que no. Y te voy a ayudar a lograrlo.
1. ¿Cómo lograr que te busquen para trabajar?
No basta con crearte un perfil en LinkedIn y sacarte una fotografía profesional. Lamento decirte que deberás invertir más tiempo y esfuerzo que eso.
Para comprender cómo funciona esto, conversemos de un principio básico de la economía. Cuando un producto es muy demandado pero escaso, su precio aumenta. Esto se conoce como un mercado de alta demanda y baja oferta. Si te han subido los limones en el súper porque una helada mató la cosecha, sabes de lo que hablo. Un caso extremo es cuando solo una persona ofrece el producto, creando un monopolio y permitiéndole poner el precio que quiera.
En conclusión, debes desarrollar un conjunto de habilidades que sean muy demandadas por las empresas, pero que pocos poseen. Durante muchos años, un ejemplo fue el de los programadores. Muchas empresas requerían sus servicios, pero había pocos que podían proporcionarlos. Como resultado, los salarios en este campo se dispararon y fue relativamente sencillo encontrar trabajo en el sector, al menos por un tiempo.
Históricamente, el camino para adquirir estas habilidades escasas y demandadas solían ser las universidades. Primero obtenías un título de pregrado, luego un máster, y con ello te asegurabas un lugar en el mercado laboral en un corporativo de América Latina. Si era un MBA de una empresa de Estados Unidos, mejor todavía. Esta estrategia sigue siendo válida en muchos contextos, aunque no es tan segura como hace 20 años.
No obstante, el propósito de este artículo es explorar más allá del camino tradicional hacia un MBA. Quiero enseñarte cómo puedes adquirir y desarrollar un conjunto de habilidades únicas y altamente demandadas, independientemente de tu formación académica.
2. ¿Cómo tener un set de habilidades escasas?
Primero que todo. ¿En qué industria trabajas?
Imagina que trabajas en minería. Empieza a capacitarte en el último robot diseñado para explorar túneles inestables. Si puedes conseguir una certificación, aún mejor. Dedica tiempo a practicar y luego, postula a todas las empresas que lo necesitan.
Si trabajas en reclutamiento, deberías entender cómo la Inteligencia Artificial está transformando tu sector. Intenta automatizar parte de tu proceso de selección y luego, resalta esta habilidad en LinkedIn. Más empresas están buscando reclutadores con capacidades tecnológicas.
Supongamos que estás en contabilidad. Mantente al día con las últimas leyes fiscales y guía a pequeñas empresas en su transición. Luego, busca esas empresas desesperadas por alguien que comprenda cómo adaptar su contabilidad a las nuevas normas.
¿Y si te desempeñas en marketing? Dedícate a estudiar growth hacking, estadística y programación. Implementa estas habilidades en un proyecto, consigue una base sólida de seguidores y muestra tu éxito en las entrevistas.
Independiente de tu sector, los pasos a seguir son los mismos:
- Identifica una habilidad escasa, generalmente técnica y/o reciente. Si cumple con ambas condiciones, aún mejor.
- Practica hasta convertirte en un experto. No necesitas ser el mejor, pero sí destacarte por encima del promedio.
- Demuestra tu habilidad a las empresas que la necesitan.
Tener un certificado siempre es un plus, pero no todas las habilidades son certificables. Piensa en el SEO: es una habilidad que cambia tan rápido que un certificado emitido hace 6 meses puede carecer de valor. O peor aún, he visto profesionales que se saben toda la teoría pero no han podido posicionar nada en su carrera profesional.
A continuación, te presento una estrategia para sortear este problema.
3. Apaláncate mostrando tus habilidades
Todos los trabajos son interesantes. He gastado más horas de mi vida de las que me sentiré orgulloso admitir viendo videos de personas limpiando alfombras. No me digas que tu trabajo es menos interesante que eso. Ni siquiera me gusta limpiar.
Muestra tu habilidad en público. Deja que sean las personas las que te juzguen y no te limites sin intentarlo. Te aseguro que si hay alguien dispuesto a pagarte por lo que haces, entonces hay alguien que está dispuesto a ver lo que haces y aprender de ti. Ya sea porque tu trabajo es genuinamente interesante o porque alguien puede solucionar un dolor que tiene con ello.
Atrévete a mostrar que eres capaz de resolver cosas que los demás no y encuentra la forma de compartirlo. Puede ser un video, por redes sociales o por un blog. Mientras más personas sepan de lo que eres capaz de hacer, es más probable que encuentres trabajo en el futuro.
Todo este proceso se llama apalancarse. Básicamente, estás haciendo que las redes sociales y los buscadores trabajen por ti en la búsqueda de trabajo. Imagínalo como un montón de robots a tus órdenes en la búsqueda de empleo. Solo tienes que darles las instrucciones adecuadas para que puedan ayudarte mejor.